É
l fútbol en la actualidad es el deporte con mas seguidores en el mundo, su popularidad ha permitido a equipos como Alemania convertirse en una potencia económica y deportiva a base de los ingresos que obtiene de la Copa del Mundo de la FIFA, donde inclusive comunidades indígenas en Brasil se han visto beneficiadas.
El deporte como evento social siempre tiene un mundo adentro y otro fuera de las canchas, es importante que jugadores y dirigentes tengan un trato humano con los aficionados que al fin de cuentas son los que pagan las entradas a los estadios y mantienen a las instituciones y patrocinadores de las selecciones.
Tal es el caso del actual campeón del mundo Alemania, que con un contrato de por vida con la empresa de indumentaria deportiva Adidas, ha logrado dar la mejor imagen del gigante de mercadeo, sus logros en las copas del mundo han elevado notoriamente su posicionamiento en le ranking de la FIFA. Pese a no alcanzar levantar la copa desde 1990 los dirigentes alemanes crearon un plan de trabajo para retomar la cima del fútbol y devolver la alegría a los millones de alemanes que esperaban nuevamente la copa del mundo.
Por estas razones Alemania decidió que Brasil 2014 era el mundial indicado para hacer historia nuevamente, no dejarían pasar la oportunidad de ganar un mundial, pero sabían muy bien que ningún equipo europeo se ha coronado campeón del mundo en tierras sudamericanas. Circunstancias como el clima, la humedad y los largos viajes para jugar en horas donde el calor no deja a los europeos rendir al 100% los 90 minutos del partido, haciendo bastante difícil la tarea de los europeos a ganar la copa.
Toda esta información la tenia en cuenta el técnico alemán Joachim Löw cuando antes de iniciar el Mundial, los medios de prensa se enteraron del plan revolucionario del entrenador de la selección, el mismo tenía en mente conseguir la Copa de Brasil 2014, pero sabía que necesitaba total apoyo de la Federación Alemana de Fútbol, por eso los encargados respectivos viajaron a Brasil en busca de un espacio para entrenar y mantener concentrados a los 23 jugadores con tal de aclimatarlos y perfeccionar su rendimiento.
En un principio fue tomado como broma y el deseo de Joachim Löw que en el 2013 se hizo realidad cuando recibieron la autorización de la FIFA, así compraron un terreno que estaba a 30 kilómetros de Porto Seguro, una inversión de 15 mil metros cuadrados y se llamaría Campo Bahía. El gobierno local consciente de los beneficios, no tardó en firmar las licencias necesarias, uno de los atractivos fue la solución de no llevar empleados alemanes, la misma gente de la zona tuvo la oportunidad de trabajar en la construcción del complejo hotelero que constaba de 14 viviendas de dos plantas, 65 habitaciones, edificios administrativos, piscinas, cancha de fútbol para los entrenamientos, gimnasio y hasta un pequeño aeropuerto a 30 kilómetros, que serviría para trasladarlos a Fortaleza, Recife y Salvador de Bahía.
Sin duda el campo de concentración en Brasil durante meses previos, para aclimatar a los jugadores a sido la mejor inversión realizada por el equipo alemán, de esta forma lograron ganar la Copa del Mundo de la FIFA 2014. Ahora que los alemanes regresan a su país, y este complejo construido pasará a ser propiedad de los habitantes de Santo André, quienes además recibirán un complejo turístico junto al mar que les servirá para generar ingresos y mantener en buen estado las instalaciones, entre ellas una carretera, un centro de salud y 10 mil euros para adquirir una ambulancia son otros de los beneficios que los brasileños tendrán, gracias a la selección de Alemania.
Lo más importante aun se dio a conocer cuando el alcalde comunico que parte del complejo será usada como escuela para los niños más pobres de la zona. Por estas razones Alemania ha pasado a la historia, no solo por ser el primer país europeo en levantar la Copa del Mundo en América, también una muestra de trabajo y planificación sin olvidar el beneficio de toda una localidad, de un país ajeno al suyo, en un continente lejano.
Por Fabian
