Las impredecibles circunstancias del fútbol lo destinaron para que en el duelo del orgullo sea el destinado a defender uno de los puestos más álgidos en el campo, pero el juvenil cancerbero del León no se arruga ante la dimensión de esa responsabilidad.
Con Noel Valladares y Donis Escober en la Selección, la meta olimpista reserva su cupo para que en el clásico del próximo sábado el juvenil Francisco Reyes se encargue de contener los embates motagüenses y él lo asume con mucho compromiso y alegría.
“Es muy bonito jugar un clásico, gracias a Dios se me va a presentar la oportunidad, esperemos que sea el primero de muchos y sacarlo con un buen resultado”, se ilusiona el novel portero que disputará su segundo derbi capitalino.
Son juegos aparte
Pese a no ser un habitual en este tipo de partidos, Panchi ya tiene claro qué ingredientes traen consigo los duelos entre Olimpia y Motagua.
“Sabemos que es un compromiso grande, es otro tipo de juegos, independientemente cómo vengan los dos equipos, son partidos a muerte, que nadie los quiere perder”, confiesa Reyes.
Pero más allá de asumir el encuentro como una oportunidad para irse ganando la confianza del olimpismo, el meta reconoce que en el preámbulo del juego hay cierta desesperación por escuchar el pitazo inicial.
Nerviosismo inevitable
“Siempre antes de un partido está la tensión y la ansiedad por querer ya estar en el campo, pero esperamos trabajar bien para llegar de la mejor manera. Hay que esperar que llegue la hora, esperamos estar tranquilos, con serenidad y primeramente Dios saquemos ese partido adelante”, sostiene el guardameta que tuvo un mal recuerdo en su última aparición frente a Victoria.
Idóneo para reivindicarse
Al recordar ese duelo, el meta reconoce que tuvo cierto grado de culpabilidad por haberse metido, aparentemente, con el balón en su marco, por lo que vislumbra el derbi como un chance de oro para recobrar los bonos en la familia blanca.
“Es un bonito partido para reivindicarse después de lo que sucedió en el último juego y esperamos sacar avante este partido”, sentencia Panchi, mientras se prepara a tope para hacer olvidar a dos de los cancerberos más experimentados del balompié nacional.
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