Los aficionados hondureños podrán observar a partir del 30 de Septiembre el trofeo a la Copa del Mundo.
La obra, de oro macizo que se le otorga al campeón de la Copa del Mundo inició el jueves en Rio de Janeiro una gira por 89 países, antes de retornar a Brasil para el Mundial de fútbol que tendrá lugar del 12 de junio al 13 de julio de 2014.
La ceremonia de inicio de la gira se llevó a cabo al pie de la estatua del Cristo Redentor de Rio de Janeiro, en presencia de los campeones de cada uno de los mundiales en los que triunfó Brasil, y que rememoraron el momento en que alzaron el trofeo: Zagalo (1958), Amarildo (1962), Rivelino (1970), Bebeto (1994) y Marcos (2002).
«Recuerdo la noche cuando lo tuve en mis manos, en 2002 en Japón. Fue un instante inolvidable que me llenó de orgullo; fue un gran honor para mi país», declaró Marcos, campeón del Mundial-2002.
El trofeo, que representa a dos figuras humanas sosteniendo el planeta Tierra, realizará un viaje de 267 días por 89 países y podrá ser apreciado por los aficionados, antes de ser entregado a los próximos ganadores de la Copa del Mundo.
«Nos llena de alegría poder llevar de nuevo esta joya del fútbol por todo el mundo, sobre todo ahora que muchos países ya han reservado su plaza en el Mundial 2014», comentó el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, en un comunicado.
El trofeo de la Copa, que tiene 36.8 cm de altura, pesa 6,175 g y está hecho de oro macizo de 18 quilates, tendrá como próximo destino Tahití.
El zócalo de la Copa tiene dos incrustaciones de malaquita y en su fondo es donde se graban los nombres de los ganadores desde 1974, año en el que se otorgó por primera vez a los triunfadores el flamante trofeo (la entonces Alemania Federal).
El actual trofeo reemplazó a la Copa Jules Rimet, el primero diseñado para el certamen planetario y que sobrevivió a la II Guerra Mundial.
Brasil ganó el derecho a conservar la Copa Jules Rimet tras haber conquistado su tercer título mundial en 1970, pero el trofeo, que representaba a la diosa de la victoria, fue robado en Rio de Janeiro en 1983. Se cree que los ladrones la fundieron para vender el oro.
El Trofeo del Mundial 2014 llegará a Honduras, procedente de Costa Rica, el 30 de septiembre.