Por Stephen Eisenhammer RÍO DE JANEIRO (Reuters) – Bernardo Rezende podrá no ser una figura reconocida mundialmente como Michael Phelps, Usain Bolt o Rafael Nadal, pero en Brasil, un país sumamente aficionado al voleibol, el entrenador no puede caminar tranquilamente por las calles de su ciudad natal sin ser detenido para firmar autógrafos o tomarse «selfies» con fans. …