Costa Rica actual campeona de la Copa Centroamericana, sufrió la baja a última hora del volante de contención David Guzmán por un esguince en la rodilla derecha.
Su lugar, y por posición natural dentro del terreno de juego, será ocupado por Óscar Esteban Granados, del Club Sport Herediano.
Granados llega a sumar como uno más a la lista de ex mundialistas que estarán en el certamen, aunque no jugó ni un solo minuto.
Costa Rica, que integra el grupo A de la Copa Centroamericana junto a Nicaragua y Panamá, disputará el torneo con ocho futbolistas que asistieron al Mundial de Brasil 2014, aunque resentirá ausencias importantes como la del portero del Real Madrid Keylor Navas y el atacante del Fulham inglés Bryan Ruiz.
El equipo costarricense partió hoy hacia Washington, donde debutará el próximo miércoles ante el combinado nicaragüense, en un partido que, en teoría, no debería suponer mayor problema para los ticos ante un equipo con poca tradición futbolística.
Aunque ha reconocido la necesidad de que Costa Rica gane el torneo, el seleccionador interino, Paulo Wanchope, ha advertido sobre los riesgos que conlleva menospreciar a los rivales y creerse favoritos.
«A nuestros rivales hay que respetarlos. Hay que jugar y es ilógico dar por un hecho que Costa Rica va a golearlos», expresó recientemente el seleccionador y exjugador.
Costa Rica viene de firmar un papel histórico en Brasil 2014, donde por primera vez alcanzó unos cuartos de final en los que fue eliminada en los penaltis por Holanda.
«Lo lógico para el mundo era la goleada que nos íbamos a traer del Mundial y no fue así por esto hay que tener mucho cuidado con creernos favoritos», declaró Wanchope.
Costa Rica ha ganado siete de las doce ediciones de la Copa Centroamericana, antes conocida como Copa Uncaf, por lo que el conjunto tico siempre parte como uno de los favoritos.
Entre las principales figuras de Costa Rica para la Copa sobresalen el portero del Alajuelense Patrick Pemberton, el centrocampista del AIK sueco Celso Borges, y los atacantes Joel Campbell, del Arsenal inglés, y Marco Ureña, del FC Midtjylland danés, todos mundialistas en Brasil.
Después de enfrentar a Nicaragua el miércoles, Costa Rica jugará ante Panamá el domingo 7 de septiembre.
Los dos primeros avanzarán a las semifinales al igual que los dos primeros del grupo B, que está integrado por El Salvador, Honduras, Guatemala y Belice.
El campeón de la Copa Centroamericana obtendrá un boleto directo a la Copa América 2016 y los cuatro primeros se clasificarán a la Copa Oro de la Concacaf.