En un barrio de La Ceiba, «La Novia» de Honduras, Eulogio «Don Pala», el padre de los hermanos Palacios, fundó hace más de treinta años un equipo de fútbol menor que con el pasar del tiempo, se ha convertido en una cantera inagotable de jugadores.
Claro, los más famosos son sus hijos, Milton y Jerry del Marathón, Jhony del Olimpia y Wilson que se inició en el Victoria, luego pasó a los «Albos» y de ahí al fútbol de Europa donde hoy brilla en el Tottenham de Inglaterra.
Hay muchas maneras de hacer historia en la Copa Mundial de la FIFA. Que tres hermanos participen de una misma fase final representando a su país es, definitivamente, una de ellas.
Los Palacios, de ellos estamos hablando, ya tienen ahora un capítulo con nombre propio en los anales del torneo, luego de que Jerry fuera convocado de urgencia por el entrenador de Honduras Reinaldo Rueda para reemplazar por lesión a Julio César de León, uniéndose así a sus dos hermanos menores, Jhony y Wilson, quienes integraron el plantel designado originalmente para Sudáfrica 2010.
“Lo hemos hablado y sí, somos conscientes de lo que esto significa. De hecho, yo era parte de la primera lista de 30, más no pasé el corte el final. Estar en un Mundial con Honduras después de 28 años de espera es increíble, pero compartirlo con tus hermanos es un regalo de Dios, algo que nuestros hijos y nietos recordarán para siempre”, dice Jerry a FIFA apenas unas horas después de tocar suelo sudafricano.
Jerry es mediocampista ofensivo, tiene 28 años y juega en el Hangzhou Greentown de China, mientras que Jhony Palacios, de 23, es zaguero central del Olimpia, actual campeón de Honduras. El más conocido es Wilson, de 25 y también volante ofensivo, quien se ha hecho un lugar en el fútbol inglés primero con la camiseta del Wigan Athletic y ahora con la del Tottenham Hotspurs.
“Estaba en China mirando imágenes del Mundial cuando sonó el teléfono. Al tomarlo reconocí el número de Wilson y me extrañó. Atendí y me dijo: ‘Aquí lo tengo al lado mío al Profesor Rueda que quiere conversar contigo’. Claro que me sentí algo triste por Rambo (NdeR: De León), porque es un gran amigo, pero al mismo tiempo, di gracias a Dios por darme la oportunidad de cumplir dos sueños, el de jugar el Mundial y el de hacerlo con mis hermanos”, cuenta Jerry con una sonrisa.
Fuerza en la adversidad
Además de los tres que están ahora en Sudáfrica, Don Eulogio y Doña Orfilia dieron a luz a otros tres hijos en el populoso y humilde bario de La Ceiba: Miriam, la única mujer; Milton, quien también es futbolista y hasta jugó un par de partidos clasificatorias para Alemania 2006; y Edwin, quien hoy tendría 18 años.
La historia de Edwin es trágica, ciertamente. Cuando apenas despuntaba su carrera en las selecciones juveniles catrachas, fue secuestrado por delincuentes durante un asalto a la casa familiar, quienes lo asesinaron a pesar del rescate que se pagó por él. “Edwin es nuestra guía desde el cielo”, dice Jerry emocionado. “Todo lo que hacemos lo hacemos por él: es nuestra fuerza interior y la fuente de nuestra fe”, agrega el volante. Jerry sabe que deben ser momentos muy emotivos para sus padres. “Es probable que para mi madre sean días de alegría y de tristeza al mismo tiempo. Pero somos una familia muy fuerte, que cree en Dios y siente que lo mejor está siempre por venir”, aclara.
A nadie escapa que tanto en la formación futbolística como personal de los Palacios tuvo mucho que ver Don Milton, ex jugador y entrenador. Jerry recuerda una anécdota de niño. “Estábamos jugando en una suerte de cancha que teníamos en casa que era de piedra. En un momento, Milton, el mayor, le hizo un foul a Wilson, quien tienen un carácter fuerte y le respondió, tomándose a golpes. Ahí llegó mi papa, los separó y nos dijo a todos: ‘El fútbol es un juego y tienen que divertirse’. Desde ese día trabajamos muy fuerte, y es por eso que hemos logrado tantas cosas”.
Wilson es, cuenta el mayor de los Palacios en Sudáfrica, quien “pone los puntos” entre los hermanos pese a su edad. “Es nuestro líder. Supo sobreponerse a muchos obstáculos y ahí lo tienen, jugando en un gran nivel y con la posibilidad de irse a un grande de Europa. Es una motivación extra para Jhony y para mí, que tenemos menos experiencia internacional”.
La conversación va llegando a su fin y es inevitable hablar de España, el próximo rival de Honduras. Desde su fe, Jerry deja una última reflexión. “Será durísimo, ya que sigue siendo favorita a pesar de perder con Suiza. Pero todo puede pasar. Wilson decía de niño que un día iba ser titular en la selección en un Mundial y lo cumplió. Así que en la vida, nada es imposible”. (Fifa.com)