Estados Unidos necesita ganar este viernes
Tras un buen debut, Estados Unidos y Eslovenia se enfrentan el viernes (16H00 locales, 14H00 GMT) en el Ellis Park de Johannesburgo con la esperanza de seguir soñando con una calificación para octavos.
Eslovenia, que derrotó a Argelia 1-0 en su debut el domingo, hasta podría lograr su boleto para octavos si vence a Estados Unidos, que empató 1-1 en su primer partido contra Inglaterra, uno de los equipos favoritos.
«Vamos a ganar este partido», advirtió el centrocampista esloveno Andrej Komac, a lo que el guardameta norteamericano Tim Howard respondió que «hablar no cuesta nada».
El portero estadounidense, que realizó un brillante partido frente a Inglaterra, se declaró listo para el segundo duelo, a pesar de un dolor de costillas tras un choque en el primer encuentro. «Esto no me va a detener», proclamó.
Los eslovenos, que encabezan por ahora el Grupo C, no dejaron una muy buena impresión frente a Argelia, aunque aprovecharon un gran error del arquero rival para marcar el gol de la victoria.
En cambio, Estados Unidos confirmó contra Inglaterra los progresos que ya había exhibido hace un año en la Copa de Confederaciones, en la que eliminó a España en semifinales (2-0), aunque luego perdió la final contra Brasil (3-2).
El equipo norteamericano tiene un esquema bastante básico: una defensa firme y contragolpes relámpagos, liderados por el volante Landon Donovan, y aprovechados por los veloces delanteros Clint Dempsey o Jozy Altidore.
Por su parte, Eslovenia cuanta con una defensa muy buena y un portero seguro, Samir Handanovic (del Udinese italiano) y un buen ambiente de grupo.
«Es un equipo colectivamente muy fuerte», admitió el seleccionador argelino Rabá Saadane. «Llevan jugando muchos años juntos y se conocen muy bien. Tienen posibilidades de pasar a octavos», agregó.
Los estadounidenses tratarán de demostrar lo contrario ante esta selección balcánica, la nación más pequeña con representación en el Mundial (2 millones de habitantes).
«Será otro tipo de partido», avisó el técnico norteamericano Bob Bradley, comparándolo con el empate (1-1) cosechado ante Inglaterra en el debut mundialista de los norteamericanos.
«Tienen la habilidad de aguantar atrás y ganarte a la contra», apuntó el entrenador de Estados Unidos, cuya nación es la más grande de las que compiten en el Mundial sudafricano (300 millones de habitantes).
