Andy Najar (Izq) y a la derecha Lester Blanco (17) y Andrés Flores (20)
La fortaleza, la altura y el rodaje internacional de la mayoría de los jugadores de la Selección Sub 23 de Honduras, son entre otras cosas, los puntos a favor que algunos analistas han hecho saber que El Salvador, tendrá en contra el sábado en el juego de semi finales del Torneo Pre Olímpico en Kansas.
Del lado salvadoreño, todos coinciden que la técnica es la mejor arma del equipo Cuscatleco para poder doblegar la velocidad y fortaleza de los hondureños.
La Prensa Gráfica de El Salvador, hizo el miércoles, un análisis de los pro y contras de los hondureños para el juego del sábado en el estadio «Livestrong Park» de Kansas City a las cuatro de la tarde hora de Honduras.
Para ellos, Andy Nájar, Eddie Gabriel Hernández y Anthony Lozano son parte de las tres piezas claves que el el técnico Mauricio Alfaro debe estar analizando como evitar que le hagan daño.
Nájar, quien milita en el DC United de la MLS, es la figura legionaria que el técnico Luis Fernando Suárez ha convocado para reforzar su línea de volantes.
Este jugador, que desborda por el extremo derecho, estuvo entrenando un par de días con el Tottenham de la Premier inglesa a finales del año pasado.
La zaga de la Azulita tampoco puede pasar por alto a Eddie Hernández, delantero del BK Häcken, de la primera división de Suecia, y no por su procedencia, sino por lo letal que se presenta dentro del área. Este “Killer” en el juego aéreo es la principal amenaza que tendrá la Azulita cuando el sábado se juegue el boleto a Londres.
De momento, en este preolímpico, Hernández encabeza la lista de goleadores de la “H”, tras anotarle un gol a Panamá y otro a Trinidad. Igual, la zaga cuscatleca fue víctima de su resorteo durante un amistoso que disputaron hace un par de semanas y que acabó 2-0 a favor de los catrachos.
Su acompañante habitual no es otro que Anthony Lozano, delantero del Alcoyano español, que mide 1.83 metros de estatura y que también tiene gol. Eso, si Suárez no se decide por Rommel Quioto, otra variante en delantera.
La zaga hondureña la sostienen dos torres: Hilder Colón de 1.87 metros de estatura, y el capitán Johnny Leverón, de 1.80 metros. Por los carriles desbordan Wilmer Crisanto por derecha y Ever Alvarado por izquierda. Son estos cuatro guardianes los que impiden la entrada de sus rivales y los que dan puerta a los balones que acaban al interior de las porterías contrarias, porque Honduras exprime y saca petróleo de la velocidad y potencia física de sus jugadores, así como de las jugadas a balón parado por la altura que manejan.
“(Honduras) tiene un concepto táctico de no desarmarse y desordenarse jamás. Aprovecha mucho la altura entre sus dos zagueros y los dos delanteros en las pelotas quietas”, analizó, para la Prensa Gráfica Ruben Israel, técnico de la Azul mayor.
Es a partir de estas armas que los catrachos sustentan la ilusión de asistir a Londres, y aunque hay escépticos, ven a El Salvador como un rival mucho más accesible de lo que hubiese sido Estados Unidos.
“(El Salvador) tiene mucha técnica, ellos siempre nos han superado en eso, pero Honduras cuenta con mejores individualidades y físicamente los superamos”, dijo el técnico José De la Paz Herrara, el popular “Chelato Uclés”, al periódico La Prensa de Honduras.
El último juego no cuenta
El juego más reciente entre hondureños y cuscatlecos en este apartado acabó 2-0 a favor de los catrachos, pero ese partido –disputado el 17 de marzo pasado– tiene detalles que no permiten medir cuál de los dos estilos de juego se impondrá el sábado en Kansas.
Honduras triunfó con goles de Ever Alvarado y Eddie Gabriel Hernández que ingresó en lugar de Romell Quito. Para ese duelo amistoso, Andy Najar y Anthony Lozano, no se habían sumado a la concentración de la Bi Color.
En El Salvador, no estuvieron en dicho encuentro: Milton Molina (Defensa del Metapán), Diego Chavarría (Once Municipal) y Andrés Flores y Léster Blanco (Metapán) . (Tomado de la Prensa Gráfica)
