Como una muestra palpable del decaimiento acelerado del fútbol hondureño, el pasado Apertura fue uno de los torneos más críticos para los equipos de la Liga Nacional de Honduras, a tal grado que no hubo un tan solo club que no registrara déficit en alguna de sus entradas.
Tan angustiante es la situación financiera, que durante todo el campeonato se reportaron 41 déficit y, de las 18 fechas regulares, únicamente en la tercera no se registraron números rojos en alguna de las cincos plazas en que se jugó esa jornada.
“Por supuesto que el pasado torneo llegó una menor cantidad de aficionados, las recaudaciones han sido relativamente menores, pero mejoramos mucho al final”, aceptó el presidente de la Liga Nacional, Selim Canahuati, al comparar los 213,632 aficionados del torneo anterior con los 280,553 hincha que asistieron al antepasado Clausura 2012.
Huelgas, el reflejo de la crisis… Ese panorama que reflejan los escalofriantes números fue evidenciado por el hecho que durante el torneo más de la mitad de los equipos se declararon en huelga por la falta de pagos y eso siembra la intranquilidad en los dirigentes del fútbol hondureño.
“Es preocupante que todos registraron déficit, pero es mucho más alarmante que seis equipos hayan paralizado labores, porque eso nunca había sucedido y eso es indicativo de la difícil situación económica por la atraviesan casi todos los equipos de la Primera División”, afirmó el máximo representante de la Profesional al recordar los paros de Marathón, Platense, Victoria, Vida, Real Sociedad y Atlético Choloma.
El cierre fue bueno
Sin embargo, la última sensación del pasado campeonato parece alumbrar el oscuro túnel, ya que en los seis juegos se obtuvieron datos negros, lo que genera la interrogante entre los dirigentes del balompié nacional. “La afición regresó en multitudes en los últimos partidos, por qué no asumir esa misma actitud durante todo el campeonato? esa es la pregunta que me hago”, autoanalizó Canahauti, quien es consciente de los principales motivos que apartaron a la gente de los estadios en casi toda la competencia.
él reconoce que una de las grandes razones que ahuyentaron a la afición de los inmuebles deportivos nacionales es que “los equipos en todo momento tienen sus promociones interesantes y la gente no ha respondido, entonces creo que debemos identificarnos plenamente con nuestro fútbol porque cada vez le damos más espacio al fútbol de otras latitudes”, destaca Selim al hacer referencia a otras ligas como España, Inglaterra e Italia.
El Clausura podría ser peor
Y es que, pese ese dulce cierre del Apertura, no se impidió que este torneo quedara registrado como uno de los peores en los últimos tiempos, aunque los dirigentes anticipan que para el próximo Clausura hay elementos sobre la mesa que podrían agudizar la crisis económica. “Históricamente, la Selección ha afectado a las taquillas de Liga y allí se tiene que reflejar la creatividad mediante promociones que le permita a los equipos contar con gran número de los estadios”, puso fin Canahuati.
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