SAN ANTONIO, Texas, EE.UU. (AP) — El francés Tony Parker, al igual que todos sus compañeros en San Antonio, pasó una noche inquieta, preocupado por el tendón de la corva derecha que lo molestó durante el tercer juego de la final de la NBA y amenaza el impulso que los Spurs lograron luego de apabullar al Heat de Miami.