El Profe Héctor Vargas sueña con coronarse por primera vez como campeón nacional.
A 24 horas del crucial encuentro ante el Olimpia, el argentino reconoce que claramente el Victoria llega en desventaja.
“La realidad es que nos enfrentamos a un rival con una gran estructura y que invierte mucha plata para ser campeón y nosotros ya ven como llegamos”, dijo el entrenador, que asegura que reconoce que jugará como la cenicienta en este partido.
Para Victoria el título sería un enorme logro porque nadie apuesta por el Jaibo.
“Vamos con las ganas de ser campeones y ya lo dije antes, si salimos ganadores seremos eternamente felices, si no sale, ya hicimos mucho por estar aquí y contra todos los pronósticos”, dijo el técnico.
Por la tarde, ya en Siguatepeque, el argentino dirigió un ligero entrenamiento que apenas duró hora y media para luego concentrarse en el hotel.
“No tenemos bajas, estamos completos, todos los jugadores están a disposición”, señaló. “Esta semana hemos trabajado lo mejor posible para ver si con la ayuda de Dios ganamos la Copa”, dijo.
Vargas y sus discípulos tienen enfrente una final que para el argentino es su primera en el fútbol nacional.
En Honduras su carrera ha tenido altos y bajos siempre en equipos denominados “chicos” como la Universidad, Hispano, Platense y Victoria, entre otros.
Victoria durmió en el altiplano
Con la intención de evitar una sobrecarga muscular por el largo viaje desde La Ceiba, el Victoria se trasladó desde ayer a Siguatepeque, en donde realizará un ligero trabajo, y pasó la noche para luego hoy trasladarse a Tegucigalpa.
Aparentemente solventados los problemas económicos que amenazaban con impedir que los Jaibos viajaran, el equipo ceibeño ya prepara su invasión a la capital, en donde, contra todos los pronósticos, intentará arrebatarle el título al Olimpia, que hasta ahora se mantiene como amplio favorito.
Los Lecheros se regresan al puerto el domingo con o sin la copa.