Venciendo a Holanda en tiempo extra con un gol de Andrés Iniesta, la Seleción de España que llegó como favorita antes del Mundial, confirmó los pronósticos y se coronó campeón del Mundo por primera vez en su historia.
Iniesta marcó el tanto en el minuto 116, tras recibir un pase en el área de Cesc Fábregas, cuando todo hacía pensar en una resolución en la tanda de penales.
España, cuyo mejor resultado hasta ahora había sido un cuarto puesto en el Mundial de Brasil-1950 consigue acabar con el maleficio que le perseguía en el torneo.
Holanda jugó desde el minuto 109 con diez jugadores, por expulsión de John Heitinga, aunque el equipo naranja podría haber quedado en desventaja mucho antes al perdonar el árbitro inglés Howard Webb algunas tarjetas.
El equipo ‘Tulipán’ perdió su tercera final del Mundial, tras haber caído también en las de 1974 y 1978.