El actual campeón ha recibido seis goles en dos partidos y todos, por desaplicaciones defensivas. Lo del domingo contra Parrllas One, es preocupante, dos de los defensas llamados por Jorge Luis Pinto a los microciclos de la Bi Color, fueron vulnerados con facilidad.
Contra Platense, Los Mimados no pudieron mantener la ventaja de dos goles y terminaron empatando 2-2. El domingo, la historia se repitió. Un equipo sin equilibrio defensivo y con ventajas enormes empezando desde el portero Licona, sumándose Figueroa y Montes, Motagua no puede aspirar a rivalidar el título con una zaga de vidrio.
Lo más lamentable, al Motagua le sacaron de la bolsa lo que parecia un triunfo en 19 minutos después que ganaba tres a uno hasta el minuto 71.
En el primer gol de Parrillas, toda la zaga, dio ventajas después del centro de Nelson Alvarez que Darwin Bermúdez remató a placer.
Al 72, Nelson Alvarez ni sombra la hicieron para poner el tres a dos. En otra jugadada a balón parado, Juan José Rodríguez mandó un centro al segundo palo donde Licona le metió suave las manos, el rebote no le pudo despejar nadie y Jefferson Bernández anotó con suma facilidad. Ya con el empate era un bochorno, y faltaba la puntillada final.
Pase a la espalda de Montes y el habilidoso Iván Edgardo López le hizo dos fintas a Juan Pablo Montes y central de Motagua nunca evitó y definió de gran forma, 4-3.
Seis goles en dos partidos los cuales iba ganando, son para estar preocupados en el Motagua
