Una vez más la irregularidad del futbolista hondureño quedó en evidencia el viernes en la derrota seis a cero contra Japón.
Un mes después de un asombroso empate ante Estados Unidos- con todas sus estrellas- en Boca Ratón, el mismo plantel de jugadores tuvo un desempeño desalentador, sin memoria y sobre todo, cero actitud. A este grupo de jugadores los puede dirigir el mejor técnico del mundo y el desempeño sera siempre el mismo. Una de cal y otra de arena.
No es posible que contra Estados Unidos, Honduras plantó cara, fue atrevida, sofocó varias veces la porteria de Nick Rimando y ante Japón, fue un flan. No es cuestión de entrenador, es de mentalidad de los jugadores.
Las comparaciones no son buenas, pero hay un ejemplo claro. Costa Rica sigue en la ruta de las celebraciones- sin Pinto- y con un entrenador Novato que dirige por primera vez a nivel mayor, la respuesta es clara, el nivel de los jugadores costarricenses es superior al de Honduras. Wanchope, Pinto o cualquiera en este momento al frente de Costa Rica saborea la gloria, el compromiso en todos los partidos de la Selecciòn Tica se palpita el derroche, el sentimiento por la camisa Nacional, es una constant no un variable que Honduras adolece.
El viernes fue la de cal ante Japón, el martes podría ser la de arena ante China porque con los jugadores de Honduras- no de ahora- nunca se sabe. Un día tocan la gloria y al siguiente bajan al infierno. El problema no es Medford, son los jugadores.
