Motagua parece haber encontrado la solución a sus interminables problemas.
El domingo, ante la Real Sociedad y con Pepe Treviño siguiendo el juego en su casa de México, vía Internet, el Azul dio la sensación de haber recuperado la memoria de equipo grande de la mano de hombres de la casa: Reinaldo Clavasquín y Amado Guevara.
“Hay que darle méritos a Clavasquín, porque él hizo un gran trabajo durante la semana y el grupo le respondió en la cancha”. Quien habla es Amado Guevara, ahora jugador, capitán y AT que, luego, cuenta su participación en este nuevo capítulo del Mimado.
“A medio tiempo recibí la charla como jugador y, después, di mi opinión como AT; en los cambios solo me metí en el de Melvin, porque él me dijo que ya sentía el cansancio, así que de allí en lo demás creo que él (Clavasquín) lo hizo bien”.
Aparecieron de la nada…
Entre los aciertos que el Lobo destaca del binomio que Pedro Atala nombró en lugar de Pepe Treviño fue poner en la cancha a jugadores como Melvin Valladares y Georgie Welcome, desterrados en la época del timonel mexicano. “Se vio a un Melvin totalmente diferente y Georgie peleó y luchó todos los balones”.
El ídolo de los motagüenses recalcó la actitud, uno de los puntos más flacos que él mismo criticó en la gestión anterior y dejó entrever que, desde la salida de Pepe, el ambiente es otro.
No quiere polémica…
Motagua venció al equipo de Raúl Martínez Sambulá y sumó su cuarto gane. Antes, el mexicano declaró que le parecía raro que uno de los máximos goleadores del Ciclón haya expresado que “esperaba la oportunidad de dirigir”, justo después de su renuncia.
El Lobo contestó con prudencia: “Lo único que puedo decir es que el domingo Motagua trabajó bien y hasta los cambios entraron con otra actitud, Eddie ingresó como si fuera su último partido, Júnior Padilla y el Tatín Morán, igual. El equipo tiene que encontrar la alegría, comunión, armonía y confianza que se había perdido”.
Eso sí. Este Motagua tiene poco espacio para crecer, ya que apenas restan tres jornadas para llegar a la liguilla. “Siento que vamos a mejorar, porque debemos ir tomando más confianza juego a juego”.
En el otro lado del banquillo, es el propio Clavas el que asume su rol y empieza a hablar sobre este nuevo Ciclón. “Al inicio fue muy duro, porque había esa incertidumbre sobre la continuidad del profe Treviño; la sorpresa fue el lunes, cuando él me comunica que me iban a dar el equipo”, reveló aquel defensa central que le dio un título al Ciclón con un golazo de oro contra Olimpia.
“Debemos recobrar la mentalidad de equipo grande”, es la consigna que tiene el profe, que ya empezó a mover el tablero y usar jugadores que habían tenido pocas chances. “La meta es clasificar a la liguilla y, puestos allí, aspirar a más”.
Con el binomio o con Pepe, claro está, el único techo donde puede topar el Motagua es el campeonato. Nada menos que eso le pide su gente…
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